El ataque a Sony Pictures está generando una serie de sucesos desafortunados para la productora, ya que ha provocado que varios filmes a cargo de la empresa tengan problemas con sus presupuestos por lo que se han cancelado temporalmente algunas filmaciones. El sistema de pagos de Sony ha sido deshabilitado, lo que ha generado que … Continued
El ataque a Sony Pictures está generando una serie de sucesos desafortunados para la productora, ya que ha provocado que varios filmes a cargo de la empresa tengan problemas con sus presupuestos por lo que se han cancelado temporalmente algunas filmaciones.
El sistema de pagos de Sony ha sido deshabilitado, lo que ha generado que las producciones queden pausadas o que sus presupuestos de producción se hayan disparado, como es el caso de la nueva película de James Bond.
“Spectre”, la nueva entrega del 007, comenzó filmaciones el 8 de diciembre y como está prevista para estrenarse en noviembre del siguiente año, su costo se ha elevado a 300 millones de dólares, lo que la ha vuelto una de las producciones más caras en la historia del cine.
El reciente “hackeo” a Sony ha costado cerca de 100 millones de dólares y aunque no se han encontrado a los responsables, el grupo Guardians of Peace se ha adjudicado estas acciones.
Entre la información revelada por los hackers se han dado a conocer los salarios de los ejecutivos, la lista de alias de algunos actores así como los posibles filmes que se producirán.
Con información de Business Insider.